sábado, 27 de enero de 2024

Análisis crítico sobre el sistema estatal de comunicación científica

Una de las partes más importante de la ciencia en un país es su sistema de comunicación científica. Marshall McLuhan decía que “lo que no se comunica, no existe” y no puede tener más razón.

Para analizar críticamente el sistema de comunicación científica de un país, hay que hacerlo, al menos, sobre tres ejes: la legislación disponible que regula el sistema, los agentes que participan en él y las actuaciones que realizan estos agentes.

Legislación disponible en el sistema de comunicación científica español

La Declaración Universal de Derechos Humanos manifiesta que “toda persona tiene derecho a participar en el progreso científico y en los beneficios que de él resulten”. Además, la Constitución Española de 1978 ratifica que “los poderes públicos promoverán la ciencia y la investigación científica y técnica en beneficio del interés general”.

Más aún, la Ley de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación en su versión más reciente amplia estos conceptos indicando que las Administraciones Públicas fomentarán las actividades conducentes a la mejora de la cultura científica y tecnológica de la sociedad a través de la educación, la formación y la divulgación. Esta ley también indica que los Planes Estatales de Investigación Científica y Técnica y de Innovación incluirán medidas para mejorar la formación y la cultura científica e innovadora de la sociedad fomentando su participación, incluyéndola en todo el sistema educativo y promoviendo su acceso a los colectivos más desfavorecidos. También se tomarán medidas para proteger el patrimonio científico y tecnológico y promover su divulgación. Además, se apoyará a las instituciones involucradas en el desarrollo de la cultura científica y tecnológica y se incentivará y reconocerá el papel de su personal de investigación y de las Unidades de Cultura Científica (UCC+i) de universidades y centros de investigación.

Con todo esto, podemos asegurar que hay suficiente legislación sobre el sistema de comunicación científica, pero puede que eso luego no se corresponda con la realidad.

Agentes participantes en el sistema de comunicación científica español

En el sistema de comunicación científica tenemos diversos agentes. Los principales son la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT), dependiente del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades; los museos científicos municipales, autonómicos y nacionales; las UCC+i y sus agrupaciones: ComCiRed entre todas las UCC+i y Red Divulga de las UCC+i junto con otras estructuras de divulgación creadas por las Universidades Españolas; y los diversos agentes autonómicos, provinciales y locales.

De estos agentes, FECYT es el protagonista en el diseño del sistema estatal de comunicación de la ciencia para realizar las labores de difusión y comunicación de los resultados. Trabaja para reforzar el vínculo entre ciencia y sociedad a través de acciones que promueven una ciencia abierta e inclusiva, la cultura y la educación científica, da respuesta a las necesidades y los retos del Sistema Español de Ciencia, Tecnología e Innovación y propicia la colaboración entre el resto de agentes implicados en actividades de I+D+I para lograr su objetivo de fomentar la investigación científica de excelencia, el desarrollo y la innovación tecnología para mejorar la competitividad de la industria española y mejorar la calidad de vida de la ciudadanía en general.

Visto esto, se puede asegurar que hay suficientes agentes en el sistema estatal de comunicación científica y que el sistema sigue una estructura jerarquizada y por territorios, al igual que el resto de instituciones del país.

Actividades realizadas en el sistema de comunicación científica español

Veamos ahora las distintas actividades que realiza cada uno de los actores que participan en el sistema de comunicación científica.

FECYT procura herramientas y recursos para apoyar y promover las iniciativas que surgen en todo el territorio. Algunos de estos son la Encuesta de Percepción Social de la Ciencia, la Convocatoria de Ayudas para el Fomento de la Cultura Científica, Tecnológica y de la Innovación, la Agencia SINC de noticias científicas, la Oficina de Ciencia y Tecnología en el Parlamento para garantizar la toma de decisiones legislativas y ejecutivas basadas en pruebas científicas y el Science Media Center (una plataforma con recursos, contenidos fiables y fuentes expertas para cubrir la actualidad).

Los museos científicos tienen una doble función educativa y divulgativa para la comunicación científica que realizan en función de su temática con diversas actividades. Por desgracia, los museos por lo general no cuentan con un gran despliegue de personal que permita realizar tantas actividades como les gustaría.

Las UCC+i actúan como intermediarios entre las instituciones que las acogen y los ciudadanos con el objetivo de promocionar la cultura científica tecnológica y la innovación a través diversas actividades como la comunicación, la divulgación y la formación científicas. El problema de estas UCC+i es que no todas tienen los mismos medios y recursos para realizar estas labores de comunicación, divulgación y formación científica.

La red ComCiRed tiene como objetivo servir como un punto de encuentro anual para exponer las iniciativas destacadas de las diferentes UCC+i y compartir experiencias y fracasos para la identificación de buenas prácticas que ayuden a mejorar el diseño de las actividades.

La Red Divulga ha elaborado la primera Guía de Valoración de Méritos de Divulgación Científica colaborando con FECYT y va a dar el primer diagnóstico sobre estructuras de divulgación científica en las Universidades Españolas.

Por último, los agentes autonómicos, provinciales y locales participan en el sistema estatal de comunicación científica a través de varias iniciativas y actividades. El número de acciones divulgativas que puedan realizar estos agentes depende directamente del presupuesto del que cuenten, así como del personal con el que cuenten en sus instituciones.

Las actividades de cada uno de los agentes que participan en el sistema de comunicación están adaptadas a sus objetivos y a su capacidad de actuación, pero lo reseñable en este punto es que la cantidad de personal y de recursos económicos que existe en cada uno de estos agentes no siempre es suficiente para realizar las labores de divulgación y comunicación científica de forma satisfactoria. 

Conclusión final

A mi modo de ver, el sistema estatal de comunicación científica tiene la legislación y los agentes necesarios para realizar una buena labor de difusión y comunicación a lo largo y ancho del país. Lo que le falta, sin embargo, son los recursos económicos y de personal para poder realizar las actividades mínimas indispensables de forma adecuada y para poder innovar con la realización de nuevas actividades igual de enriquecedoras que, por desgracia, no pueden realizarse con los medios actuales.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¿Qué medio de transporte es mejor en una ciudad grande como Madrid?

Un año más he sobrevivido a los contenidos de las asignaturas del Máster en Cultura Científica de la UPNA. He entregado todas las tareas (au...